Por qué eres tu propia mejor competencia

Por qué eres tu propia mejor competencia

Si se encuentra comparándose con su amigo, compañero de trabajo, vecino o pareja, debe detenerse en este momento. Compararte con los demás es la forma más fácil de perder el enfoque y distraerte de tus objetivos. Como ser humano, el mejor favor que puede hacerse a sí mismo y al mundo en general es concentrarse con precisión en sus objetivos personales y en su definición de lo que significa para usted el éxito con esos objetivos. ¿Qué quiero decir con esto?

Enfócate en tu arte

Seth Godin a menudo habla sobre cómo debemos enfocarnos en descubrir cuál es nuestro arte y compartir este arte con el mundo. Por su propia naturaleza, el arte de todos es distinto y único. Solo podemos desarrollar nuestro mejor arte mirándonos profundamente y compartiendo lo que nos hace especiales con el mundo. Para él, el arte es todo lo que es creativo, apasionado y personal, y el gran arte resuena con el espectador, no solo con el creador.

Solo tiene sentido que competir con otros distraiga del carácter distintivo que hace que nuestro arte sea especial. Al compararnos con los demás, perdemos la magia que el desarrollo de nuestro arte central le brinda al mundo. La competencia con los demás en cierto sentido nos hace ordinarios. Fomenta la imitación y, si no tenemos cuidado, nos hace perder nuestra esencia. Qué aburrido.

Quizás la mejor ilustración de la magia que puede aportar a nuestro arte competir con uno mismo sea Steve Jobs. La obsesión maníaca de Steve Jobs con su arte fue evidente para todos en la cuidadosa atención al detalle que se observa en la mayoría de los productos de Apple. Esto nació claramente de su visión interna, que no habría visto la luz del día si no se hubiera mantenido comprometido a aprovechar su creatividad interna. Le debemos al mundo aportar nuestra originalidad y perspicacia al trabajo que hacemos.

¿Cuál es tu arte? ¿Estás enfocado actualmente en convertirlo en la mejor versión posible de tu arte que el mundo haya visto? ¿Qué estás haciendo para mejorarlo y hacerlo deleitar y conectar con tu audiencia?

Aquí hay tres formas en que me mantengo enfocado cada vez que me encuentro tratando de competir con otros:

1. Escribe tus metas

Escribir tus objetivos es una de las maneras más fáciles de mantenerte en contacto con tu propósito interno y ver dónde te gustaría estar en un período de tiempo determinado. La investigación ha demostrado una y otra vez que escribir sus objetivos aumenta drásticamente sus posibilidades de alcanzarlos. Al escribir sus metas, es importante anotar los pasos que ha tomado o planea tomar para lograrlas. Además, asegúrese de que sus objetivos sean específicos, medibles, activos, realistas y cronometrados (SMART) para aumentar sus posibilidades de éxito.

2. Sigue tu progreso

A continuación, realice un seguimiento de su progreso. Esto le daría una idea de qué tan avanzado está en su viaje para mejorar su arte. Obtener una buena idea de su progreso lo ayuda a determinar las áreas en las que necesita mejorar o trabajar más duro. También le asegura que va por buen camino si está cumpliendo con todos sus objetivos establecidos.

3. Elaborar un plan de mejora

Ahora que ha revisado sus objetivos, elabore un plan de mejora que pueda ayudarlo a perfeccionar su arte. Dado que tiene la mejor comprensión de cómo debería ser la mejor expresión de su arte, proponga pasos de acción que puedan ayudarlo a mejorar lo mejor que pueda y que puedan ayudarlo a alcanzar su definición de éxito.

Estos tres pasos nunca me han fallado porque me mantienen enfocado en mi brújula interna y me ayudan a revisarme y evaluarme continuamente para mejorar.

¿Has probado alguno de estos? ¿Cómo te han ayudado a competir eficazmente contigo mismo?