Por qué las personas que no pueden aceptar las críticas no tendrán éxito

Por qué las personas que no pueden aceptar las críticas no tendrán éxito

¿Alguien ha dicho alguna vez que estás a la defensiva contra las críticas? Es como si fuera una verdad universal que la crítica es algo bueno pero ante ella no podemos evitar y nuestro mecanismo defensivo se sobresalta.

De hecho, es natural que uno esté inclinado a rechazar la crítica. Famosamente conocido, nuestros cerebros están conectados con una respuesta de lucha o huida. Cuando nos encontramos con el peligro, en este caso, las críticas, algunos de nosotros queremos huir, mientras que otros quieren contraatacar. Pero después de todo, es importante saber que hay muchos beneficios detrás de las críticas. Si podemos refrenar nuestra tendencia natural, con gusto aceptaremos las críticas y nos acercaremos al éxito.

La crítica te guía al siguiente nivel.

Piensa de esta manera, la crítica te está ayudando a mejorar, no a insultarte o arrastrarte.

No es escandaloso compararnos con estrellas perdidas: todos estamos encontrando el camino en la oscuridad. Es habitual sentirse perdido a veces. De hecho, se necesita coraje para admitir que todavía tenemos muchas cosas que aprender. Nadie es perfecto, como dice el viejo refrán.

En este viaje de búsqueda, la crítica sirve como hitos que reflejan nuestro progreso, donde estamos ahora. Y necesitamos estas señales para crecer. Imagina que estamos diseñando un producto, escribiendo un artículo o entablando una relación, sin ningún comentario que nos recuerde, ¿cómo sabríamos si estamos en el camino correcto o no?

La crítica nos da la información que necesitamos para prevalecer en todos los aspectos de la vida.

La crítica te ayuda a conectarte más profundamente con los demás.

Todos tenemos nuestras propias historias. Recibimos una educación diferente, o venimos de diferentes orígenes. Eso es lo que nos hace únicos, pero también nos hace imposible entendernos completamente.

Existe inherentemente un muro entre los seres humanos. No obstante, podemos romper este muro si queremos.

La comunicación es una buena manera de entenderse mejor, y la crítica positiva es una forma efectiva de comunicación. La crítica positiva nos informa cuál es la impresión que los demás tienen sobre nosotros, y a partir de esto sabemos cómo ser una mejor persona.

Es mejor tratar las críticas como una invitación abierta a una relación más profunda. Darse cuenta de que también se necesita el coraje de los demás para criticarnos. Si no pesan mucho esta relación, no se aventurarán a darnos la crítica.

Por lo tanto, atesora cada crítica de los demás, reflexiona sobre eso y tómalo como una oportunidad para conectarte más profundamente con los demás.

Vivimos en una cultura malsana que no fomenta las críticas.

De alguna manera, en el mundo de hoy, la crítica abierta es un tabú. Cuando uno intenta hacer una crítica, también tiene que acompañarla con 20 elogios.

Y eventualmente, el que critica a los demás es odiado y considerado quisquilloso, una oveja negra. Pero ese no es un ambiente sano, sí necesitamos críticas para crecer.

No seas un buscador de elogios si quieres tener éxito.

Imaginablemente, viviendo en esta cultura, todos nos volvemos buscadores de elogios. Estamos hambrientos de elogios, y si somos criticados, nos volvemos infelices.

Para este fenómeno, hay un término en psicología llamado sesgo de confirmación. El sesgo de confirmación básicamente significa la tendencia a buscar y favorecer la información que confirma nuestras propias creencias, mientras se da una consideración excesivamente menor a las posibilidades alternativas.

La crítica es la clave del éxito.

Dados los beneficios que traen consigo las críticas, no podemos ignorarlas, negarlas o incluso luchar contra ellas. Sí, la crítica puede ser dura para nuestros oídos, pero su valor es incuestionable. Al enfrentar las críticas, piense en los beneficios que tiene en lugar de dejarse llevar por nuestra tendencia a defendernos de ellas.