9 razones por las que la grasa abdominal no desaparece y cómo deshacerse de ella

9 razones por las que la grasa abdominal no desaparece y cómo deshacerse de ella

Es difícil de comprender cuando realmente se piensa en ello, pero los hechos no mienten: uno de cada tres estadounidenses es obeso, y esta tendencia no parece estar disminuyendo todavía. Lo más probable es que haya un poco (o tal vez mucha) de grasa obstinada en el vientre de la que has estado tratando de despejarte. En lugar de pasar otro año entero con esta molesta celulitis, echa un vistazo a nueve formas de deshacerte de ella para siempre.

1. Descubre exactamente cuánta proteína necesitas

Este tiene que ver con el nivel de actividad en la vida que ya mantiene. En un mundo donde los medios de comunicación y los cabilderos prácticamente han dominado las concepciones de los consumidores sobre las necesidades de proteínas, la mayoría de las personas aún creen que no están obteniendo suficiente proteína. Lo contrario es en realidad la verdad. La mayoría de las personas ya obtienen tanta proteína como necesitan, si no más.

El problema aquí es saber a qué número apuntar, si su gasto de energía es alto. Por cada libra de masa corporal magra, debe aspirar a 0,5 a un gramo de proteína. Esto asegura que toda actividad física, como entrenamiento de fuerza o cardio, sea seguida por cantidades adecuadas de reposición de proteínas.

2. Si tu cuerpo necesita más, ajusta tu ingesta

Si está entrenando para un logro atlético enfocado (como maratones o levantamiento de pesas) o un atleta de élite, sin duda necesitará más proteínas. Su ingesta de proteínas (y el tipo de proteína) debe adaptarse a la actividad específica que está realizando. La mayoría de los levantadores de pesas y culturistas consumen proteína de suero de leche, mientras que las personas que realizan ejercicios cardiovasculares intensos y las personas con otras preferencias alimenticias pueden pedir proteína de guisante o proteína integral. proteína de arroz

3. Manténgase irritantemente bajo en carbohidratos

Sí, es cierto: una de las formas más rápidas y confiables de perder peso es evitar los carbohidratos. Comer menos de 150 gramos por día aumentará drásticamente la capacidad de su cuerpo para quemar grasa y entender cómo usar mejor la glucosa.

4. Bebe más agua de lo habitual

El agua es una de las principales sustancias de «transporte» que su cuerpo usa para hacer las cosas. El agua no solo lo mantiene hidratado y fresco, sino que ayuda a su cuerpo a convertir los carbohidratos en energía utilizable. El agua se utiliza para eliminar los productos de desecho y también participa en la descomposición de las células grasas no deseadas.

5. Empieza a comer más grasa

Sí, lo leíste correctamente.

La grasa es en realidad la mejor fuente de energía del cuerpo, por lo que sería negligente evitar este consejo. Suena contradictorio desde el principio, ya que la misma palabra «gordo» es vilipendiada y despreciada por millones de estadounidenses y otras personas en todo el mundo. Sin embargo, la grasa tiene nueve calorías por gramo, mientras que los carbohidratos y las proteínas solo tienen cuatro. Entonces, solo con esta lógica, puede comer menos grasa y aún así obtener una nutrición más calórica que la que obtendría comiendo simplemente carbohidratos o proteínas.

6. Prueba unos días con 50 g de carbohidratos o menos

Hacer un «ayuno de carbohidratos» en el que casi no consumes carbohidratos en realidad impulsará a tu cuerpo a quemar más grasa. Su cuerpo usa alrededor de 150 gramos de carbohidratos por día, pero lo que no puede obtener de su comida ese día, lo obtendrá de la gluconeogénesis. Esta elegante palabra significa «crear nueva glucosa».

7. Comienza tu día con el pie derecho

Para ayudar a su cuerpo a saber cómo usar mejor los carbohidratos, consumir la mayor cantidad de carbohidratos a primera hora de cada día es un enfoque sólido. Esto le da a su cuerpo suficiente tiempo para asimilar los carbohidratos y usarlos antes de que se almacenen como grasa.

8. Divide y diversifica con proteína

Incluir una cantidad más pequeña de proteína en cada comida, en lugar de consumirla durante una gran «ventana de proteína», es lo mejor para su cuerpo. Su sistema digestivo solo puede procesar una cierta cantidad de nutrientes en un momento dado, por lo que es óptimo repartir su consumo de proteínas entre las comidas. Esto está estrechamente relacionado con la forma en que puede intoxicar su cuerpo si consume demasiado de cualquier micronutriente.

9. Completa tu velada con una nota ligera, con grasas saludables

Cuando sea el momento de consumir tu última comida del día, mantente enfocado en los nutrientes en lugar de sucumbir a los carbohidratos demasiado dulces y estériles. Si usted es del tipo convencional, docenas de las principales organizaciones de salud recomiendan basar una comida ligera en pescado. Si eres del tipo a base de plantas, lo mejor es un poco de mantequilla de maní sin azúcar agregada o la mitad de un aguacate. Luego, mientras duerme, su cuerpo usará estas grasas y proteínas para restaurar los músculos dañados y refrescar los componentes celulares que requieren grasa.