5 maneras fáciles de mantenerse saludable y en forma
5 maneras fáciles de mantenerse saludable y en forma
Adquirir el hábito de comer bien y hacer ejercicio constantemente es bastante difícil. Mantenerse saludable y en forma es aún más difícil. Hasta que alcance un buen ritmo y forme hábitos saludables, puede ser un desafío descubrir cómo mantenerse en su mejor forma física sin obsesionarse con eso.
Aquí hay cinco hábitos fáciles que puede comenzar a formar hoy para ayudarlo a mantenerse saludable y en forma a largo plazo.
1. Compre menos alimentos procesados en el supermercado
Todos los alimentos que comemos se procesan de alguna manera, pero los alimentos que se someten a un procesamiento químico, lo que significa que están hechos de ingredientes que no son reales, lo que los hace altos en azúcar y bajos en los nutrientes que realmente necesitamos para alimentar nuestros cuerpos y mantenernos saludables, debe evitarse.
Como regla general, trate de limitar la cantidad de alimentos no perecederos preempacados que tiene en su carrito de compras al momento de pagar, alimentos como papas fritas, barras de granola y comidas congeladas. Comprar artículos perecederos, como yogur, pan y productos frescos, es una señal de que lo que está comprando se parece más a los alimentos que su cuerpo puede digerir fácilmente y usar como combustible.
2. Haz del ejercicio parte de tu día a día
El hecho de que no vivas en el gimnasio o no tengas tu propio equipo de fitness no significa que no puedas mantenerte en forma. A veces, son las pequeñas acciones que agregamos a nuestra vida diaria en medio de otras actividades las que marcan la diferencia.
Encuentre formas creativas de mantenerse activo sin importar cuán ocupada esté su agenda. Puede haber días en los que realmente no tengas tiempo para ir al gimnasio, incluso cuando quieras. Puedes hacer sentadillas y estirarte mientras hablas por teléfono. Invierte en un escritorio de pie o arma una versión improvisada si te sientas mucho durante el día. Camine en lugar de conducir, si es práctico. Pregúntele a un cliente o compañero de trabajo si prefiere hablar y caminar en lugar de sentarse a tomar un café.
3. Come más de tres veces al día
Estamos acostumbrados a comer tres comidas grandes al día porque eso es lo que hicieron nuestros antepasados cuando llegaron por primera vez al Nuevo Mundo. Probablemente se basa cuando come fuera de su horario escolar o laboral: un desayuno decente por la mañana, un almuerzo ligero a la mitad del día y una cena abundante después de un largo día de trabajo de nueve a cinco. Cuando tenga hambre en el medio, generalmente tomará un refrigerio de la máquina expendedora o esperará hasta su próxima comida, lo que puede provocar que coma en exceso sin querer.
Comer comidas más pequeñas con más frecuencia (sí, eso significa picar) puede ayudarlo a ser más consciente de cuánto está comiendo y cuándo. La mejor manera de administrar comidas más pequeñas con más frecuencia es aprender a comer cuando tenga hambre, dejar de comer cuando esté lleno y abstenerse de comer por aburrimiento o estrés. Puede empacar refrigerios saludables para usted durante el día, de los cuales hablaremos más a continuación.
4. Prepara bocadillos con anticipación
A veces terminamos comiendo demasiada comida chatarra solo porque es fácil de agarrar y masticar. Cuando tiene poco tiempo o intenta realizar múltiples tareas, hacer el esfuerzo de cortar una manzana y encontrar la mantequilla de almendras en la parte posterior del refrigerador no ocupará el primer lugar en su lista de prioridades. En su lugar, buscará la bolsa de papas fritas, no se requiere preparación.
Estos no tienen que ser bocadillos complicados. Puede ser algo tan simple como meter una bolsa de palomitas de maíz en el microondas y verterlas en una bolsa de plástico o hacer tus propios chips de col rizada la noche anterior para llevar contigo. Si compra frutas y verduras frescas en el supermercado, córtelas y guárdelas en el refrigerador de inmediato para acceder fácilmente a ellas la próxima vez que esté en casa y tenga hambre de un refrigerio.
5. Escribe una descripción detallada de lo que significa estar sano para ti personalmente
El mayor error que cometemos cuando decidimos comenzar a vivir de manera más saludable es usar los parámetros de otra persona para dar forma a nuestro nuevo estilo de vida. La rutina de ejercicios y los hábitos dietéticos de una persona no son un estándar que deba seguir. La clave para mantenerse saludable y en forma es averiguar su propia definición de salud y decidir cómo se va a ceñir a ella.
Puede definir ser saludable como dormir de seis a ocho horas todas las noches, hacer ejercicio durante 30 minutos tres veces a la semana y comer los cinco grupos de alimentos todos los días. Si eso es lo que puede administrar lo que va a funcionar con su horario, no hay bien o mal. Escriba cómo planea modificar su estilo de vida y deje que esa descripción moldee sus acciones.
Conclusión
El camino hacia una vida saludable no implica cambios drásticos y repentinos. Adoptar un estilo de vida más saludable implica mirar dónde se encuentra, imaginar dónde quiere estar y descubrir cómo puede incorporar modificaciones graduales y sutiles a su rutina normal.
Al dar un paso corto y simple a la vez, estará en camino hacia una vida más feliz, más saludable y más satisfactoria en muy poco tiempo.